La Equitación de Trabajo, como modalidad ecuestre, nace en el sur de Europa en 1996. Es en España, Italia, Portugal y Francia, donde se realizan las primeras pruebas y se organizan los primeros campeonatos europeos.
El éxito obtenido hace que se expanda rápidamente a otros países como Alemania, Bélgica, Inglaterra, Suecia, Suiza, Austria, Australia, Holanda, República Checa, San Marino, Brasil, Colombia, Eslovenia, EE.UU. y México, con un importante aumento de los participantes.
En el 2004 se crea la Asociación Mundial de Equitación de Trabajo, WAWE (por sus siglas en inglés World Association for Working Equitation) cuyos objetivos principales son reglamentar, organizar y desarrollar esta disciplina ecuestre.
Esta disciplina se crea con la finalidad de valorar y mejorar las técnicas ecuestres desarrolladas en el tiempo por los jinetes que utilizan el caballo en los distintos aspectos del trabajo de campo, llevándolos a un plano deportivo y de competición. Requiere agilidad, equilibrio y armonía entre jinete y caballo. Es practicado por hombres, mujeres y niños, y hoy en día es una de las disciplinas que más interés han despertado tanto entre jinetes de otras disciplinas como del público general.
La Equitación de Trabajo busca demostrar la funcionalidad de las razas equinas participantes. El caballo para esta disciplina deber ser ágil, rápido, y ante todo con muy buena cabeza. Cualquier raza de caballo puede participar en esta disciplina.
Otra de las características especiales es el hecho de que constituye un escaparate etnográfico y cultural, ya que promociona el mantenimiento de los trajes tradicionales y guarnicionería propias de cada país.
La Equitación de Trabajo consta de tres pruebas obligatorias y una opcional:
1. Prueba de Doma o Adiestramiento: Es bastante similar a la prueba de Doma Clásica y demuestra las habilidades atléticas del caballo, cumpliendo las órdenes del jinete. Los caballos entran en una pista rectangular de 40×20 mts, al son de la música escogida por el participante y realizan movimientos obligatorios en aproximadamente 7 minutos, para ser evaluados por un jurado de entre tres y cinco jueces.
2. Prueba de Manejo: Es un evento de tipo “gymkhana” en el que los caballos deben franquear obstáculos similares a los que se pueden encontrar en el campo (por ejemplo, cruzar puentes, pasando a través de puertas, etc.) . Tiene como objetivo demostrar la capacidad del jinete y del caballo para superar estos obstáculos con tranquilidad, precisión, estilo y regularidad.
3. Prueba de Velocidad: Esta prueba implica transponer algunos o todos los obstáculos de la prueba anterior, lo más rápido posible sin preocuparse por el estilo o movimiento y sin cometer faltas de penalización.
4. Prueba de Apartar la vaca (opcional): A diferencia de las otras tres pruebas, la prueba de Apartar la vaca se realiza por equipos de tres o cuatro binomios. En una pista de mínimo 80 x 30 metros, se colocan 10 o más vacas previamente marcadas con un collar de diferente color o número. El objetivo es conseguir separar del rebaño, la vaca que corresponda en forma individual a cada uno de los miembros del equipo, para llevarla a un corral que se encuentra al otro extremo de la pista. Cada equipo cuenta con un tiempo límite de 4 minutos para la ejecución de esta prueba. Esta prueba es opcional, dependiendo si el comité organizador de una competencia, cuenta o no con las instalaciones adecuadas para trabajo y estabulación de ganado vacuno.